sábado, 2 de marzo de 2019

Colaboración


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El rechazo de Anderson a la intervención militar en Venezuela, sin embargo, se dio en un contexto específico: respondiendo vía Twitter a la congresista demócrata Alexandria Ocasio-Cortez, a quien acusó de equivocarse "al decir que Venezuela es un fracaso de la democracia en lugar de decir que Estados Unidos está organizando un golpe sangriento. ¿Abogó por la intervención?".
Ocasio-Cortez ha sido presentada como la renovación por izquierda del Partido Demócrata, asumiendo un discurso anti-corporaciones que impugna el intervencionismo estadounidense en política exterior. Pero tal parece que con Venezuela esas premisas pierden validez, o simplemente no tienen sentido, por lo que se alinea a los operadores de la guerra contra la nación caribeña que se ubican a ambos lados del Partido Demócrata y Republicano.
Como afirma en su cuenta Rebeca M. Westphal, que un símbolo en formación del "progresismo" estadounidense dado su origen inmigrante esté a favor de la intervención contra Venezuela, y que una actriz tradicional, rubia y anglosajona condene el "golpe sangriento" de Estados Unidos, da una oportunidad para discutir en torno al fondo político y no simplemente sobre las formas.

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